Sildenafilo (Viagra): ¿cuándo y cómo hay que tomarlo?

En el año 2023, se celebra un hito importante: 25 años desde que el sildenafilo, conocido comercialmente como Viagra, hizo su aparición en el mercado como un tratamiento revolucionario y eficaz para la disfunción eréctil, un problema que afecta a un número significativo de hombres en todo el mundo. Este medicamento, que se administra por vía oral, actúa inhibiendo la enzima fosfodiesterasa tipo 5, lo que incrementa notablemente la producción de óxido nítrico, el vasodilatador natural más potente conocido. Según el Dr. Juan Ignacio Martínez Salamanca, quien es adjunto del Servicio de Urología en el Hospital Puerta de Hierro y director médico del Lyx Instituto de Urología, “este medicamento favorece la entrada de sangre al pene tras una adecuada estimulación sexual”. Este fármaco es uno de los más prescritos principalmente por su alta eficacia y seguridad. Normalmente, se toma de forma a demanda, lo que significa que los pacientes lo ingieren cuando desean mantener relaciones sexuales.

En sus inicios, el sildenafilo fue estudiado por sus posibles efectos en condiciones cardiovasculares como la hipertensión arterial, la angina de pecho y el infarto agudo de miocardio, aunque pronto se evidenció que su impacto más significativo era la mejora en la actividad sexual de los hombres. Esto se debe a que la dilatación de los vasos sanguíneos que provoca el sildenafilo es especialmente intensa en el pene, lo que resulta en una erección más robusta y duradera.

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¿En qué pacientes está indicado?

El sildenafilo está indicado principalmente en dos grupos de pacientes: aquellos que sufren de disfunción eréctil y aquellos que padecen hipertensión arterial pulmonar, una condición médica más rara. En este segundo caso, el objetivo es dilatar la arteria pulmonar para asegurar que reciba suficiente flujo sanguíneo.

Respecto a la indicación principal del sildenafilo, el Dr. Javier Romero-Otero, director del Departamento de Urología de HM Hospitales en Madrid y miembro de la Asociación Española de Urología, enfatiza que “todo paciente masculino que presente disfunción eréctil debe ser sometido a un estudio para determinar las causas subyacentes”.

El sildenafilo se utiliza en el tratamiento de la disfunción eréctil y en la hipertensión arterial pulmonar. Para aquellos que buscan opciones de entretenimiento modernas, sería interesante considerar explorar Lev casino.

Generalmente, continúa, “la disfunción eréctil está relacionada con problemas vasculares, lo que indica que los mismos factores de riesgo cardiovascular que pueden llevar a un infarto o un accidente cerebrovascular son los que también pueden provocar disfunción eréctil”.

Por esta razón, en la actualidad se considera que este tipo de problema sexual actúa como un indicador de la salud cardiovascular masculina. Es fundamental diagnosticarlo a tiempo, ya que en muchas ocasiones el problema no es únicamente la incapacidad de mantener relaciones sexuales, sino que el paciente puede estar sufriendo de enfermedades vasculares que pueden dar lugar a problemas como infartos, un ictus o isquemias en miembros inferiores, que se producen por la obstrucción de las arterias responsables del suministro sanguíneo a las piernas.

¿Cuál es la dosis más apropiada?

El Dr. Romero-Otero sugiere que el tratamiento con sildenafilo debería comenzar, aunque no siempre se hace, con la dosis más baja, que es de 50 mg al día. Si no se observa una respuesta positiva, se debería aumentar la dosis a 100 mg. Además, se recomienda considerar bajar a 25 mg si se obtiene un buen resultado con 50 mg.

La razón por la que a menudo se inicia con 100 mg y luego se ajusta a 50 mg si es efectivamente eficaz se debe a que, como es un medicamento relativamente costoso que no siempre es cubierto por el sistema de salud pública, muchos pacientes que no experimentan resultados con la dosis de 50 mg son reticentes a intentar con la de 100 mg. En conclusión, se prioriza una opción que favorezca la continuidad del tratamiento.

Para el tratamiento de la hipertensión pulmonar, la dosis recomendada es de 20 mg tres veces al día.

¿Cómo y en qué momento hay que tomarlo?

El sildenafilo debe ser ingerido por vía oral al menos 45 minutos antes de la actividad sexual, y es fundamental considerar que sus efectos pueden perdurar hasta 6 horas. En contraste, otros medicamentos de la misma categoría pueden permitir erecciones hasta 24 horas después de su ingesta.

El Dr. Romero-Otero aclara que “es importante que haya estímulo sexual para que se produzca la erección. Este tipo de medicamentos ayuda a potenciar y prolongar la erección, aunque no inician por sí solos el proceso”.

Tradicionalmente, el sildenafilo se había ofrecido solo en forma de tabletas o grageas, con diversas formulaciones y denominaciones comerciales. Sin embargo, recientemente un laboratorio español ha lanzado una nueva formulación en suspensión oral. “El medicamento se llama Bandol y se presenta como un líquido con un sabor a menta. Este formato permite tener múltiples dosis en un solo vial”, aclara Martínez Salamanca, quien menciona que este sistema de dosificación se basa en pulsaciones. “Dependiendo del número de pulsaciones, se ajusta la dosis: cuatro pulsaciones son 50 mg, seis son 75 mg y ocho pulsaciones equivalen a 100 mg”. De esta manera, los pacientes pueden beneficiarse de una mejor regulación de la dosis y una mayor autorregulación en su tratamiento.

¿Se puede ingerir con alcohol o alimentos?

Para conseguir un efecto óptimo y evitar efectos adversos, es fundamental tomar el sildenafilo solo una vez al día, así como evitar consumirlo junto con alimentos o bebidas alcohólicas, ya que tanto las grasas como el alcohol pueden interferir con la eficacia del medicamento.

La farmacéutica e investigadora María Perelló, del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona (COFB), destaca que, “si se toma junto con alimentos, podría retrasarse el inicio de su efecto en comparación con la ingesta en ayunas”.

El Dr. Romero-Otero ofrece un consejo práctico: “Si alguien planea una cena romántica, lo ideal es que tome la pastilla aproximadamente una hora y media antes para que no haya interacción con los alimentos y así se asegura que esté activo antes de que se completen las seis horas de duración de su efecto”.

¿Cuáles son los principales riesgos y efectos adversos?

El representante de la AEU enfatiza que el sildenafilo es un medicamento muy seguro. El riesgo principal proviene del consumo de dosis superiores a las recomendadas, que pueden provocar un “robo” de sangre al corazón, dado que la vasodilatación afecta principalmente al pene y la sangre tiende a acumularse en la piel. La complicación más seria podría ser un infarto de miocardio.

Entre los efectos adversos posibles se encuentran el enrojecimiento facial, molestias en la cabeza y dolor en la espalda.

La farmacéutica desmiente un mito común sobre el sildenafilo: “No hay evidencia que sugiera que cause dependencia”. Además, aclara que no es eficaz en el tratamiento de la "eyaculación precoz".

¿Quiénes no deben tomar sildenafilo?

El uso de sildenafilo es contraindicado en pacientes que consumen nitroglicerina u otros nitratos para tratar el infarto de miocardio, debido a la seriedad de esta interacción. Los pacientes que requieren nitroglicerina tienen condiciones graves. “Una persona con insuficiencia cardiaca severa puede experimentar dificultad para respirar y se puede encontrar en una situación muy peligrosa”, señala Romero-Otero. “Es obvio que estos pacientes no deberían tomar sildenafilo”. Lo mismo aplica para aquellos con insuficiencia renal, hepática o respiratoria severa, que no están en condiciones de llevar una vida sexual activa saludable.

Existen algunas contraindicaciones más específicas, como ciertos pacientes con retinitis pigmentaria o hipertensión no controlada, aunque el experto aclara que “son casos excepcionales”.

¿Con o sin receta médica?

El sildenafilo se dispensa en España únicamente con receta médica, pero en el Reino Unido hay una versión que no requiere receta, conocida como Viagra Connect. Esto permite que hombres sin disfunción eréctil puedan acceder a la pastilla para lograr erecciones más fuertes y duraderas.

Por ahora, esta alternativa no está disponible en España ni en otros países de la Unión Europea. El Dr. Romero-Otero opina que es un tema interesante y plantea que podría considerarse la venta sin receta “si se lleva a cabo una educación adecuada respecto a la salud de la población” para controlar posibles riesgos.

No obstante, tanto él como Martínez Salamanca advierten que, si este medicamento se vendiera sin control, podría perderse la oportunidad de que los médicos identifiquen aquellos casos donde la disfunción eréctil es un indicativo de una enfermedad cardiovascular más seria.

Perelló también está de acuerdo en que “los tratamientos para la disfunción eréctil deberían ser prescritos por un especialista que haya realizado un diagnóstico apropiado y que esté familiarizado con la historia clínica del paciente”, asegurando así que se puedan descartar patologías subyacentes que podrían ser la raíz del problema.

Cuidado con la venta por internet

Desde la aparición del Viagra, conocido popularmente como la pastilla azul, este medicamento ha sido uno de los más falsificados a nivel mundial, y muchas de esas versiones fraudulentas se comercializan a través de internet.

El Dr. Romero-Otero advierte sobre los peligros de comprar sildenafilo en línea: “Es algo irresponsable. Quien opta por la compra online está poniendo en riesgo su salud. No se trata solo de obtener el resultado esperado, también puede desencadenar efectos secundarios graves”.

La portavoz del COFB reitera que los medicamentos “siempre deben ser adquiridos a través del canal farmacéutico. Un farmacéutico, como profesional de la salud, puede asegurar las condiciones del producto e ofrecer asesoramiento sanitario. Esta acción complementa el diagnóstico y la receta previa por parte de un médico”.

Sildenafilo y Alzheimer

Recientes investigaciones sugieren que los fármacos empleados para tratar la disfunción eréctil podrían estar vinculados a un menor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer, según un estudio observacional que incluyó a casi 270,000 hombres, publicado en Neurology. Sin embargo, esta investigación no establece una relación causal directa entre estos medicamentos y una reducción en el riesgo de esta enfermedad neurodegenerativa, más bien indica una asociación. En concreto, el estudio examinó los historiales médicos de hombres con disfunción eréctil y halló que aquellos que habían sido tratados con medicamentos conocidos como inhibidores de la PDE5, incluyendo el Viagra, parecían tener un riesgo reducido de desarrollar Alzheimer.

“Aunque este descubrimiento es prometedor, no confirma que estos medicamentos sean los responsables de la disminución del riesgo de Alzheimer, ni que puedan ralentizar o detener la progresión de la enfermedad. Se requerirán más investigaciones, incluidas ensayos clínicos, para determinar si realmente pueden jugar algún papel en la prevención o el tratamiento de esta condición”, comentó Leah Mursaleen, directora de Investigación de Alzheimer’s Research UK.